Por Lic. Rigoberto A. Becerra D. (MAF) *
Vivimos en la era cibernética, donde todo se mueve a la velocidad de vértigo y en donde las distancias se hacen cada día más cortas y el tiempo se mide por bps. Así, de esta manera, podemos navegar en el inacabable territorio del ciberespacio, arribando a China, Rusia, Argentina, entre otros países, sin movernos un centímetro de nuestra casa. Igualmente podemos leer desde una novela de ciencia ficción, romance, hasta una obra científica del universo celular.
Este avance tecnológico de la información y del conocimiento público es una respuesta moderna y futurista a la necesidad, natural o creada, del ser humano por estar mejor y más rápidamente preparado para darle frente a sus actividades domésticas o empresariales. La obtención de conocimientos teóricos o prácticos se ha vuelto cada vez más necesaria y suficiente para un mejor desempeño en el cumplimiento de las diversas funciones de las personas.
Por muchos años, décadas y siglos, una alternativa válida, entre varias, de obtener conocimientos teóricos sobre determinado tópico general o área específica, es el de recurrir a una valiosa herramienta receptora de esos conocimientos: el libro, sea este de cualquiera de los diversos tipos existentes. Esta herramienta muy tradicional, conformada por una reunión de varias hojas de papel impresas, cosidas o encuadernadas, nos ha ayudado, nos ayuda y nos continuará ayudando, en esa búsqueda continua y sistemática de obtener información y conocimientos.
Sin embargo, dadas varias limitaciones que se están presentando en los últimos tiempos, tales como: inflación por empuje de costos de los insumos, limitación de espacio para el almacenamiento de los libros a nivel doméstico e institucional, velocidad de requerimiento y consecución de la información necesitada, aparte de la dispersión de información, todo lo cual atenta contra la necesidad y el deseo de estar actualizado; entonces surge como una alternativa relativamente novedosa en esa veloz carrera de obtención de conocimientos, lo que se ha llamado el libro virtual, hijo de esta era cibernética y del mundo de la inteligencia artificial que ya estamos viviendo y que seguirá desarrollándose cada vez más en el futuro.
Recuerden que ya es común oír hablar de organizaciones virtuales, de la Universidad virtual, de la mascota virtual, sexo virtual, bibliotecas virtuales. No se extrañen si próximamente empezamos a oír hablar de esposas virtuales, secretarias virtuales, amantes virtuales, estudiantes virtuales, hijos virtuales, presidentes virtuales.
Ahora bien, ¿que es libro virtual?. Si nos atenemos a la definición de virtual desde el punto de vista físico, podemos señalar que es un libro que tiene existencia aparente y no real, al cual no podemos tocar con nuestras manos pero que nos satisface la misma necesidad que un libro real, y al cual podemos manipular subrayando tópicos de interés, arrancándole una o varias páginas, regalándoselo a un familiar, amigo o compañero de estudio o trabajo, es decir, realizando con él mucho de lo que haríamos con un libro real.
En otras palabras, atendiendo la definición como adjetivo se puede señalar que es aquel libro que tiene la virtud de producir un efecto, aunque no lo produce estando presente.
En palabras más técnicas podemos decir que en la práctica es posible la ubicuidad en el presente, estando simultáneamente en un sitio u otro de manera virtual, acelerando la velocidad de los datos que transitan entre el emisor y el receptor, haciendo que el tiempo que permanece este dato en el medio de transmisión tienda a cero.
¿Dónde entonces tiene existencia este Libro virtual?. La superautopista de la información, con la integración de la informática y las comunicaciones y, a través de la convergencia digital, le permite a cualquier organización inteligente, entre ellas a Universidades u otras Instituciones de Educación a cualquier nivel, virtualizar nuevos ambientes educativos para clientes externos, alumnos trabajadores o ubicados a mucha distancia, a través de tecnologías modernas adecuadamente configuradas.
Esto es toda una revolución en el campo de la transmisión de conocimientos, donde novedosa metodología para el diseño de libros electrónicos y tutoriales son diariamente informadas y aplicadas en ambientes de educación virtual y a distancia. La multimedia con sus componentes de CD y DVD vienen en la ayuda de esta herramienta.
Así, el Internet con su aparición y desarrollo vertiginoso, además de su crecimiento en los diversos países del mundo, está contribuyendo cada vez más a la implantación de estas nuevas tecnologías en lo que a libros se refiere. En la exposición del Libro de Madrid 1998 se incorporó un espacio específico de libros en soporte electrónico, donde 10 firmas exitosas con los adecuados equipos informáticos mostraron al público y ofertaron libros electrónicos, los cuales en definitiva son libros en soporte distinto al papel, incorporados al mundo e l edición y de la librería tradicional que en futuro inmediato compartirán un espacio complementario pero que en un futuro más lejano, quizás ni tan lejano, pudiera constituirse en un suplantación cuasi total de los libros tradicionales.
Asimismo, en el 1er. encuentro virtual de escritores de lengua española, se realizó la presentación de libros electrónicos, publicados en formato HTML y en Internet, donde el interesado puede leerlos directamente en la pantalla, grabarlos en su computador o imprimirlos para leerlos posteriormente. Como ellos señalan, el libro electrónico hizo su aparición no hace mucho tiempo, pero muy pronto estará presente en muchos hogares debido a la velocidad con la que la tecnología se masifica, creyendo que esta es una muy buena alternativa para que los escritores presenten sus obras.
Actualmente, para ser más exactos hoy 22 y mañana 23 de abril de 1999, se está realizando en Santa Fé de Bogotá, Barranquilla y Cali, un teleseminario sobre la Universidad Virtual, con el objetivo general de conocer, aplicar e informar propuestas de nuevos escenarios educativos y corporativos que soporten nuevos universos virtuales para la formación, el aprendizaje y la asesoría en organizaciones educativas y empresariales, mediante la aprehensión y apropiación de nuevas tecnologías educativas.
Así entonces, en este mundo creciente de virtualidad, el libro virtual está llamado a desempañar un rol de primer orden, ya que de manera revolucionaria permite la consecución de conocimientos de manera más rápida, actualizada y hasta con costos muchos más bajos para el docente, el alumno, el investigador, el empresario, entre otros. La cultura en su utilización cada vez más masivamente en los diversos escenarios de la sociedad, se traducirá en una permanente mejora de esta novedosa herramienta.
Venezuela no puede quedarse atrás en la utilización de esta tecnología, pues como lo señala el profesor de la Universidad de Barcelona, España, Miguel Angel Aguareles, "la incapacidad o falta de habilidad para utilizar las herramientas tecnológicas puede conducir irremediablemente a la marginación. La aplicación de nuevas tecnologías en los procesos de educación/formación de las personas nos exige la creación de nuevos modelos de aprendizaje, nuevos procedimientos y estrategias de búsqueda, organización, procesamiento y utilización de la información"
